Aprende la diferencia entre gripe y resfriado

Tanto gripe como resfriado afectan a las vías respiratorias altas, incluyendo nariz, vías paranasales, garganta y laringe, ojos y oídos, y cursan con síntomas muy parecidos. A veces los síntómas son tan parecidos que no sabemos exactamente que sufrimos. Para evitar diagnóstico erróneo , lo mejor es que acudas a tu médico ofarmacia, pero por si quieres saber un poco más de las diferencias entre ambas aqui te las contamos:

La diferencia está en su intensidad:

  • En la gripe aparece fiebre alta (mayor de 38-39ºC), dolor muscular, articular y de cabeza intenso, y la congestión y los estornudos son muy leves. 
  • En el resfriado la fiebre es baja y el dolor es solo un simple malestar, pero la congestión nasal y los estornudos son acusados y molestos. 

Tu farmacéutico podrá recomendarte distintos productos para aliviar o acortar los diferentes síntomas.

CONSEJOS:

1. Debido a que ambas enfermedades son contagiosas, extrema las precauciones para evitar su trasmisión.
2. Tápate la boca y la nariz al toser o estornudar y utiliza pañuelos desechables cuando aparezcan los estornudos o la tos para disminuir las secreciones y evitar su posible dispersión.
3. Lávate las manos con frecuencia ya que los virus pueden permanecer activos en objetos como asientos, instrumentos de cocina, barandillas, etc.
4. Es recomendable vacunarse para evitar la gripe en el caso de personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas
y en los grupos de riesgo que determinen las autoridades
sanitarias.


En caso de padecer gripe o resfriado es conveniente:

  • Seguir una dieta basada en alimentos líquidos o semisólidos como zumos de frutas, caldos de verdura y pescado, purés y yogur.
  • Permanecer en reposo sobre todo en los primeros días y especialmente en el caso de la gripe.
  • Hidratarse, realizar lavados nasales y mantener una humedad adecuada del ambiente. Aumenta la ingesta de líquidos y mantén una ventilación adecuada.
  • Abstenerse de fumar, beber café, té o infusiones estimulantes y procurar no beber alcohol.
  • Tener en cuenta que el tratamiento farmacológico deberá ser siempre individualizado según los síntomas que tenga cada persona y su intensidad.
  • No usar antibióticos sin prescripción médica. La gripe y el resfriado son enfermedades producidas por virus. Por tanto,el uso de antibióticos no está indicado para tratarlas. Sólo elmédico podrá prescribirlos en caso de que existan o puedanaparecer complicaciones bacterianas.