Los mejores cosméticos de farmacia

Existen en el mercado cremas cosméticas para todos los tipos de pieles y casi todos sus problemas. Cremas antiedad, antiarrugas, nutritivas, exfoliantes, vitamínicas, reafirmantes, cosmética para hombres, anticelulíticos, antimanchas, limpiadoras, maquillajes…

Cada una de ellas ha de ser elegida siguiendo unos criterios, aunque se trate de marcas de gran prestigio.

Cómo elegir los cosméticos adecuados

Si no se elige el cosmético que cada piel necesita pueden surtir infecciones en la piel como dermatitis o acné, también deshidratación lo que da lugar a una piel apagada, se crean arrugas en el contorno de los ojos, en el rictus y en la frente, la piel pierde su elasticidad y suavidad. La forma de prevenirlo es teniendo en cuenta algunas pautas al elegir una crema cosmética.

Conoce tu piel. Debes saber el tipo de piel que tienes, si es grasa, seca, normal o mixta.

Piel grasa. El tipo de cosmético que se utilice no debe obstruir los poros, ello ocurre con algunos cosméticos que contienen aceites; los que tienen caolín o talco absorben la grasa disminuyendo del brillo de la piel de la cara.

Piel seca. Para este tipo de piel es recomendable usar cosméticos que contienen aceite mineral, lanolina y agua. También colágeno, ácido hialurónico, proteínas y vitaminas, entre otros componentes especialmente indicados para los rostros con piel seca.

Piel normal. Acepta todo tipo de productos; sin embargo, es necesario mantenerla hidratada y limpia. La suelen tener las personas muy jóvenes y aquellas que siguen un ritual diario de limpieza de la piel y una dieta saludable. Aunque acepte todo tipo de cremas cosméticas es necesario asegurarse de que estas no van a causar una mala reacción en la piel.

Piel mixta. Se da cuando la piel de la cara en la frente, nariz y barbilla es grasa y la piel de las mejillas es normal. Para este tipo de piel es recomendable utilizar cremas cosméticas que contengan aceite mineral, un poco de lanolina y agua.

 Tratamientos de farmacia para tu piel

La piel debe respirar. Además de ser necesaria su limpieza diaria no se deben utilizar productos que no dejen respirar la piel tapando los poros o que propicien los llamados “puntos negros”.

Identifica qué necesita tu piel. ¿Qué es lo que quieres conseguir con una crema cosmética? ¿Suavizar las arrugas, hidratar la piel, eliminar ojeras o cualquier otra función? En muchas ocasiones la piel se ve más apagada y con arrugas por otros motivos que no son la edad, es posible que una mala alimentación o ciertos hábitos lleven a ese resultado. Entonces, a pesar de elegir la mejor crema cosmética para tu piel esta no da resultado. El motivo es que es necesario prestar atención a la salud de todo el cuerpo, identificar qué carencias tiene y qué hábitos pueden ser los causantes de una piel que no nos guste.

Prueba y paciencia. Las cremas cosméticas no dan resultado el primer día, para saber si es la adecuada se deberá elegir una que sea compatible con nuestro tipo de piel y tener paciencia para ver sus resultados. Si finalmente, aunque la crema cosmética sea la recomendada, los resultados no son los esperados se deberá probar otro cosmético similar hasta que demos con el apropiado para cada persona en concreto.

El paso del tiempo. El tiempo pasa irremediablemente y con él los cambios, nuestra piel se adapta a cada uno de nuestros momentos y también reacciona a ellos. La edad, los cambios, el clima, el entorno, la salud, incluso el estado emocional se deja ver a través de nuestra piel. Es necesario elegir un tipo de cosmético para cada etapa de nuestra vida.

Los cosméticos caducan. Es posible que te hayas comprado un cosmético que te gustaba mucho y finalmente lo hayas dejado sin utilizar un tiempo. Debes saber que los cosméticos caducan y esa crema o maquillaje que tan bien te iba puede producirte efectos totalmente contrarios. También es muy importante una rutina de limpieza adecuada y cada vez que sea necesario en los accesorios que se utilizan para aplicarse los cosméticos.

La caducidad de los productos de belleza está indicada con un número seguido de una M. El número se refiere a los meses que se puede utilizar el producto una vez abierto, es decir, si indica 6M se podrá utilizar durante seis meses. Cada cosmético tiene una fecha de caducidad según sus componentes, cuando no se indica la fecha de caducidad se entiende que esa fecha es de más de tres años.

Las cremas hidratantes, de cara y cuerpo, duran doce meses. Si se aplica crema hidratante caducada en la piel pueden surgir reacciones muy adversas.

                Protector solar. Doce meses, pasado ese tiempo pierde su efectividad.

                Desodorante. Doce meses.

                Desmaquillante. Entre seis y doce meses.

                Contorno de ojos. Entre seis y doce meses.

Base de maquillaje líquida. Pueden durar un año; sin embargo, si se ven anomalías es mejor no utilizarla. No se deben someter a altas temperaturas, en caso de no poder evitarlo se deben colocar en un lugar frío, como la nevera, para preservar sus componentes.

                Polvo de maquillaje compacto o suelto. Entre doce y veinticuatro meses.

Sombras, coloretes o correctores en crema. Su duración suele ser de un año. En caso de estar en mal estado su textura cambiará, dejando de ser igual de cremosa y su olor será distinto. Si ello ocurre no deben utilizarse nunca.

                Sombras en polvo. Pueden durar unos dos años.

                Máscaras de pestañas. Entre tres y cuatro meses al ser abiertas.

Barras de labios. Unos dos años si no se someten a altas temperaturas.

Brillo labial. Del mismo modo que la barra de labios, puede durar unos dos años si no está sometido a altas temperaturas. Si su textura y color varían no debe ser utilizado.

Lápiz labial. Se pueden utilizar durante unos tres años si no se nota ningún cambio en ellos ni una reacción distinta en la piel de los labios.

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